Galicia vota este domingo con PP y nacionalistas que aspiran a liderar la Xunta

Si el PP no logra hoy su quinta mayoría absoluta consecutiva, se abre la posibilidad de que, por primera vez en la historia, haya un Gobierno regional (la conocida como Xunta) liderado por un partido nacionalista, el Bloque Nacionalista Gallego (BNG, izquierda).

El BNG es el segundo partido de Galicia y podría liderar la Xunta en coalición con los socialistas (PSdeG-PSOE), en un acuerdo postelectoral que ambos admiten, para sacar a la derecha del poder.

El PP ha ganado todas las elecciones autonómicas en Galicia hasta la fecha y según las últimas encuestas (publicadas el lunes) volverá a suceder hoy, con la elección de entre 36 y 40 diputados populares. Para obtener mayoría absoluta se necesitan al menos 38 votos.

En el parlamento gallego sólo hay actualmente representados tres partidos (PP, BNG y PSdeG-PSOE) y es el único de España sin extrema derecha.

El candidato del PP Alfonso Rueda, que asumió la presidencia de la Xunta en 2022, cuando Alberto Núñez Feijóo, rostro de las últimas cuatro mayorías absolutas en Galicia, se convirtió en líder nacional del partido.

Su principal oponente es Ana Pontón, del BNG, un partido nacionalista que, tomando posiciones más de centro, desde 2016, superó a los socialistas en anteriores elecciones autonómicas.

En el tramo final de campaña, Rueda pidió a los partidarios del PP que no dieran por segura la victoria y acudieran a votar, al mismo tiempo que intentaba trazar un paralelo entre el BNG y los separatistas catalanes y vascos.

«Hago un llamamiento a todos los votantes del PSOE que no quieren el separatismo, a todos los que quieren un Gobierno que una a los gallegos y a los que rechazan una Xunta dividida por el separatismo», dijo Alfonso Rueda en un mitin el jueves.

Ana Pontón pidió una votación útil para sacar a la derecha del poder.

«Estamos muy cerca del cambio», afirmó este jueves, y añadió: «Es el momento de que todas las personas que quieran abrir una nueva era en Galicia, independientemente de por quién votaron en otras elecciones, lo apuesten todo por el BNG». .

La campaña para estas elecciones fue «nacionalizada» de una forma sin precedentes, según analistas y medios españoles, llevando el PP, sobre todo, a mítines y debates temas como las alianzas del presidente socialista Pedro Sánchez con partidos políticos independentistas y el condena de la amnistía y los indultos a los líderes separatistas catalanes.

La última semana de campaña acabó marcada por unas declaraciones del líder del PP consideradas incoherentes con lo que ha defendido en los últimos meses. Entre otras cosas, admitió que podría conceder el indulto, bajo algunas condiciones, al expresidente de la Generalitat catalana Carles Puigdemont, que vive en Bélgica para escapar de la justicia española.

Sin elecciones desde el lunes, los analistas están divididos sobre el impacto que esta polémica podría tener en el voto gallego. En lo que coinciden es en que Feijóo, que decidió ser casi omnipresente en la campaña y no logró ganar el Gobierno nacional el año pasado, puede estar arriesgando el puesto que ocupa en estas elecciones.

Hoy están llamados a votar 2.693.624 electores, casi 4.000 menos que en las anteriores elecciones autonómicas gallegas, en julio de 2020.

En Galicia hay 2.217.110 electores residentes, 17.000 menos que en 2020, mientras que los que ahora pueden votar en el extranjero son 13.000 más, un indicador que confirma el aumento de la emigración en la región en los últimos años, uno de los argumentos que esgrimió el BNG contra la PP en esta campaña, al considerar que faltan oportunidades y que las condiciones de vida en la región han empeorado.

Si la diferencia entre PP y BNG es hoy muy corta, habrá que esperar unos días para conocer los resultados de la votación de la emigración, que podría ser decisiva.