Telefónica: la ofensiva de Madrid para contrarrestar al operador saudí STC
Veintiséis años después de la completa privatización del operador de telecomunicaciones, el Estado vuelve al capital de Telefónica. El Gobierno español anunció el martes al organismo de control de la Bolsa su intención de adquirir el 10% de la gran empresa nacional de comunicaciones, conocida en el extranjero, especialmente en América Latina, con su marca Movistar y en el Reino Unido con el nombre de O2. Se sitúa así, por un pelo, como mayor accionista, por delante de Saudi Telecom Company (STC), que compró el pasado septiembre el 9,9% del capital y ocupó provisionalmente el escalón más alto del podio, por delante de los bancos españoles BBVA y Caixabank.
La entrada en el capital de la Sociedad Nacional de Participaciones Industriales (Sepi, el fondo a través del cual el Estado es accionista único o minoritario de empresas estratégicas como Correos -el servicio de correos español-, RTVE -el sector público audiovisual-, Iberia o Enagás ) debe permitir“ Proporcionar la estabilidad necesaria para que la empresa cumpla sus objetivos estratégicos.