Fue al taller con una avería y se dio cuenta de que su ex le había puesto GPS al coche
Un hombre de 41 años fue detenido en Burgos, España, por colocar un dispositivo GPS en el vehículo de su expareja para seguirla y localizarla.
Según Telecinco, que cita a la Guardia Civil, al hombre se le imputa un delito contra la intimidad, usurpación del estado civil y utilización de datos de un tercero sin su consentimiento.
La mujer acusó al detenido tras llevar su vehículo a un taller para reparar una avería y el mecánico descubrió que llevaba en su interior un GPS con una tarjeta SIM.
La víctima desconocía la existencia del GPS oculto en su vehículo, ni había autorizado a nadie a hacerlo, por lo que miembros de las Fuerzas Armadas iniciaron una investigación y desde el primer momento sospecharon de la expareja de la mujer quien «siempre estuvo consciente de los lugares que frecuentaba el denunciante».
La investigación de la Guardia Civil logró identificar al propietario del número asociado a la tarjeta SIM del dispositivo de rastreo, que resultó ser una persona que convivía con la mujer desde hacía algún tiempo, ya que alguien le había facilitado una fotocopia de su documento de identidad para registrar el compra.
El hombre acabó detenido.
