Canarias acoge a miles de menores que suponen un problema humanitario
La situación de los menores, que viven hacinados en centros de acogida improvisados y temporales, con atención sanitaria limitada, sin escolarización y sin acceso a otros servicios, como prevé la legislación española y europea, ha sido mostrada y denunciada reiteradamente en los medios de comunicación. por organizaciones no gubernamentales (ONG), el Defensor del Pueblo español y las autoridades del archipiélago, situado en el Atlántico.
En el debate político se ha convertido en un arma de ataque entre los partidos, mientras el llamamiento de Canarias para que los menores sean acogidos por las distintas regiones de España sigue sin respuesta e incluso una propuesta legislativa con este objetivo fue rechazada esta semana por el Parlamento, porque de los votos del Partido Popular (PP, derecha), Juntos pela Cataluña (derecha independiente) y Vox (extrema derecha).
España, con 17 comunidades autónomas, es un Estado descentralizado y la acogida de menores no acompañados de adultos es competencia de los gobiernos regionales.
Ante el aumento de las llegadas de inmigrantes en pateras (pateras) desde hace más de un año, Canarias ha hecho un llamamiento a la solidaridad del resto del país, especialmente en relación con los menores no acompañados, destacando que, dado el tamaño de España, no sería especialmente complicado compartir la acogida y protección de estos niños y adolescentes.
Canarias tiene capacidad instalada para acoger a 2.000 menores, pero actualmente cuenta con cerca de 6.000 en las islas, según el Gobierno regional, que ha advertido, al igual que las ONG, del previsible empeoramiento de la situación a partir de finales de verano, cuando Aumenta, por norma, el número de ‘pateras’.
El 10 de julio, las 16 regiones restantes acordaron acoger a 400 de los menores que se encuentran en Canarias, en un acuerdo que replica otros similares alcanzados en 2022 y 2023 y que, además de voluntarios e insuficientes, no se cumplieron.
Así lo destacaron los gobiernos de Canarias y España, que esta semana llevaron al parlamento una propuesta para revisar la ley de inmigración para hacer obligatoria y automática la distribución de menores en todas las regiones cuando en una de ellas se supere la capacidad de los niños por 150% de recepción.
La propuesta fue rechazada, tras horas de debate en el pleno y negociaciones entre bastidores.
El PP y Juntos por Cataluña acusaron a los socialistas (al frente del Gobierno español) de no haber negociado con la oposición, de no garantizar a las regiones los recursos financieros necesarios o de ni siquiera tener una política de inmigración.
Vox, por su parte, se opone por principios a la acogida de menores y defiende que simplemente deberían «devolverlos a su origen», hablando de la necesidad de evitar un «efecto llamada» y asociando la inmigración y a estos menores con la delincuencia, a pesar de las normas internacionales. Los estudios y las estadísticas nacionales niegan este vínculo.
El resto de partidos acusaron al PP, Juntos pela Cataluña y Vox de falta de humanidad, falta de solidaridad, racismo y xenofobia.
El acuerdo del 10 de julio ya había supuesto, por otra parte, el fin de las coaliciones de gobierno del PP y Vox en cinco comunidades autónomas, por decisión del partido de extrema derecha, que condenó a la gente por aceptar el entendimiento.
«Es lamentable. Hay muchos temas y discursos para desgastar e insultar. No utilicen los más pequeños para eso», pidió esta semana en el Parlamento la diputada Cristina Valido, del partido Coalición Canaria (derecha), que gobierna el Islas en coalición con el PP.
El diputado habló de una «tragedia cotidiana» en las costas del archipiélago y de una «ruta atlántica mortal» de migración y afirmó que «no hay más tiempo» para responder a la situación de miles de menores, al cansancio de los profesionales que guardarlos y cuidarlos o brindarles más espacios de acogida.
«No hay. Este fin de semana llegaron más de 500 personas, de momento hay menores en el mar que no sabemos si llegarán a tierra. Rezamos para que lleguen, lo lamentable es que hay algunos que lo desean». no lo harían», afirmó el diputado, quien destacó que los inmigrantes y menores huyen de países «donde no tienen un mísero analgésico ni una comida del día garantizada», pero son víctimas de insultos y mentiras promovidas en las redes sociales por políticos fiestas.
Cristina Valido añadió, en línea con lo expresado por otros partidos, que la modificación de la ley de extranjería, además de ser una cuestión de humanidad, era ventajosa «para todo el territorio», ya que implicaba también la integración de los menores, que representan un Oportunidad y futuro para España.
«Ya están aquí. Son los contribuyentes del futuro, son los agricultores del futuro. Los vamos a necesitar», afirmó.
Alrededor de 20.000 personas llegaron en pateras a Canarias este año, un 160% más que en 2023.
Entre ellos se encuentran niños y adolescentes que abandonaron África solos o que perdieron a sus padres durante la travesía. También hay casos como el de una niña de dos años que, la semana pasada, fue rescatada viva de una ‘patera’, pero acabó muriendo en tierra.