Agente salva la vida de un bebé de 10 días en España. «No soy un ángel»
Un agente de la Guardia Civil salvó la vida a un bebé de 10 días que había sufrido una parada cardiorrespiratoria, durante la madrugada del pasado martes 13 de agosto, en Ourense, España.
Según informa Telecinco, los agentes José Antonio Carnero e Isaac Lamela se encontraban patrullando en la localidad de As Burgas, cuando se encontraron con un vehículo que tocaba la bocina y se detenía al otro lado de la carretera.
«Vimos a una mujer con un niño en brazos, medio colgado, gritando desesperadamente», dijo José Antonio Carnero, afirmando que le «entregaron el niño» ya inerte, sin pulso y con la piel azul.
“Gracias a Dios tenemos conocimientos básicos de reanimación cardiopulmonar… Le hice la maniobra de Heimlich e inmediatamente expulsó un poco de leche y empezó a respirar”, explicó.
Los agentes decidieron entonces trasladar al bebé y a la familia al hospital, que se encontraba a unos 500 metros, para averiguar qué había ocurrido con el pequeño.
Ante la prensa española, la madre del bebé, Yénifer Gutiérrez, de 24 años, describió al agente Carnero como «su ángel de la guarda». «No podría vivir sin él», subrayó.
Sin embargo, el agente rechazó ser un «ángel» y aseguró que el rescate fue posible gracias al trabajo en equipo. «Me tocó a mí, pero siempre actuamos en equipo, mi compañero velaba por nuestra seguridad, mientras yo hacía la reanimación», explicó.
«No soy un ángel, soy una persona normal, cualquiera de mis compañeros habría hecho exactamente lo mismo que yo», añadió.
El agente también dijo que creó «un vínculo» con el pequeño bebé, confesando que le «robó un pedazo» de su corazón.
