Presidentes de las federaciones regionales exigen la dimisión de Luis Rubiales
«Tras los últimos acontecimientos y el comportamiento inaceptable que daña gravemente la imagen del fútbol español, los presidentes solicitan que, de inmediato, Luis Rubiales presente su dimisión como presidente de la RFEF», se lee en el comunicado emitido tras una reunión del organismo celebrada en la sede de la federación, en Las Rozas, al noroeste de Madrid.
La Comisión de Presidentes de Federaciones Autonómicas y Territoriales de la RFEF también pidió al presidente interino, Pedro Rocha, que se desista de la más reciente comunicación de la federación a la UEFA y a la FIFA, que suspendieron a Rubiales del cargo durante 90 días, circunstancia que dictó la nombramiento de un presidente interino.
El grupo de dirigentes federativos también reiteró el «apoyo unánime» a Pedro Rocha para iniciar una nueva etapa en la RFEF, donde «el diálogo y la reconciliación con todas las instituciones del fútbol son la línea a seguir», de cara a su candidatura al campeonato de la Mundo 2030, que también integra la Federación Portuguesa de Fútbol.
Los presidentes de las federaciones autonómicas reclaman también «una profunda reestructuración orgánica en los puestos estratégicos de la RFEF» y apuestan por «las políticas de igualdad para el desarrollo del fútbol femenino».
La dimisión de Rubiales se produce tras el suceso del 20 de agosto, cuando, al finalizar el partido que consagró a la selección española femenina como campeona del mundo de fútbol, en Sídney, en el momento de la entrega de premios, el presidente de la RFEF besó a Jenni Hermoso en el labios mientras celebraban.
Siguieron numerosas críticas a lo sucedido, con la jugadora afirmando que no había consentido el beso, luego de que una primera versión dijera que todo había sucedido en un momento de mayor euforia.
Después de varios días con muchas críticas por parte de diversos sectores de la sociedad, la RFEF celebró el viernes una Asamblea General Extraordinaria, en la que se esperaba la dimisión de Rubiales, quien, sin embargo, garantizó, en más de una ocasión, que no renunciaría al cargo.
Siguió un nuevo pico de contestación y posiciones extremas, con los jugadores de la selección nacional anunciando que no estaban disponibles para volver a representar a España, mientras los actuales dirigentes de la RFEF permanecen en sus cargos.
El sábado, la FIFA anunció la suspensión de Rubiales del cargo por 90 días, y 11 miembros del cuerpo técnico del técnico, Jorge Vila, presentaron sus dimisiones. Por su parte, el técnico condenó el «comportamiento inadecuado» del presidente de la RFEF y el Gobierno español anunció una denuncia ante el Tribunal Administrativo del Deporte (TAD).
Si el tribunal considera que las infracciones son «muy graves», entonces el Consejo Superior de Deportes convocará a su comisión ejecutiva para iniciar la suspensión de Rubiales.