Madrid volvió a gritar vítores por la monarquía «manchada» por Juan Carlos I
Carlos es una mancha para la monarquía», dijo Lusa SM, de 62 años, una de las tantas jubiladas que acudieron hoy a la plaza Porta do Sol, en el centro de Madrid, para ver pasar una procesión compuesta por guardias reales a caballo y dos coches en los que seguían los Reyes de España, Felipe VI y Letizia, y sus dos hijas, Leonor y Sofía.
La comitiva se dirigía al Congreso de los Diputados, donde Leonor de Borbón, el día que cumplió 18 años, juró ante diputados, senadores, el Gobierno y representantes de otras instituciones que, cuando asuma la jefatura del Estado, respetará los derechos de los ciudadanos. y de las regiones autónomas del país reconocidas en la Constitución de 1978.
El acto fue considerado de gran valor simbólico y jurídico para la continuidad de la Corona española, «un momento histórico», en palabras de la presidenta del Parlamento, Francina Armengol, quien destacó que Leonor de Borbón expresó hoy públicamente su respeto a la Constitución de una España «plural», abierta y europea».
«Viva la Constitución, viva España, viva el Rey», dijo la socialista Francina Armengol al final de la sesión de las Cortes, provocando que cientos de personas reunidas en la Porta do Sol gritaran lo mismo.
Anteriormente, la socialista Armengol había sido abucheada en algunos momentos de su discurso cuando en la plaza de Madrid se la escuchó saludar a los presentes en el parlamento en otras lenguas oficiales en España además del castellano (euskera, catalán y gallego) o cuando invocó poetas de estas regiones. También se dedicaron abucheos al presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, cuando apareció en las pantallas el rostro del socialista.
Para SM y su amiga EM, de 75 años, la monarquía española sufre hoy «la siempre presente mancha» que le dejó el abuelo de Leonor, Juan Carlos de Borbón, a causa de los casos de corrupción y otras polémicas en las que estuvo involucrado. tras ser visto y reconocido como uno de los padres de la democracia en España, instaurada tras la muerte del dictador Francisco Franco, en 1975.
Pero también el Gobierno de izquierdas de Pedro Sánchez, que aliado con los independentistas y la extrema izquierda de Unidas Podemos «perjudica a la monarquía», defendió a los dos amigos, que no quisieron dar sus nombres y prefirieron presentarse sólo con sus iniciales.
«Basta con ver el Congreso hoy», añadieron, para subrayar que en el acto de juramento de Leonor de Borbón no estuvieron los diputados y ministros de Unidas Podemos, así como todos los partidos vascos, catalanes y gallegos y los presidentes de las administraciones regionales de Cataluña y de País Vasco.
SM y EM recuerdan bien que en 1986, cuando el padre de Leonor, Felipe VI, jefe del Estado desde 2014, prestó este mismo juramento en el Parlamento, estaban presentes todos los partidos y presidentes de las autonomías.
En un día de trabajo y colegio, los dos amigos tenían el perfil de la mayoría de las personas que vieron pasar hoy a la familia real por las calles de Madrid y que, según las encuestas sobre la Corona (pocas en España), también apoyan mayoritariamente a la monarquía y se dicen monárquicos: mayores de 60 años y de una región (Madrid) sin las llamadas «cuestiones territoriales», es decir, nacionalismo o independencia.
Quienes menos apoyan a la monarquía o sienten indiferencia hacia la institución son los jóvenes de la edad de Leonor, como es el caso de Guillermo Ruiz, de 18 años y estudiante de periodismo en la Universidad Carlos III, de Madrid.
Guillermo acudió hoy a la Puerta del Sol por un proyecto universitario, de lo contrario difícilmente hubiera ido a ver la procesión real.
Reconoce que la jura de Leonor de Borbón es probablemente el «hecho más importante que sucede estos días en Madrid y en toda España», pero se dice «indiferente» en relación con la monarquía, una institución asociada a una parte «bastante conservadora» de la sociedad. y una línea política en la que no se puede ver.
Guillermo aseguró que ni siquiera se cuestiona si es monárquico o republicano, cree que ambos regímenes funcionan, como lo demuestran varios países europeos plenamente democráticos.
«Pienso en los partidos con los que me identifico, más que en si soy monárquico o republicano», aseguró.
Aun así, ha destacado que hoy, en las calles de Madrid, y a pesar de algunos abucheos, «el ambiente era más sano» que en otras situaciones y actos, «más de unidad que de enfrentamiento», aunque «en España no todo el mundo está con los Rey, como en Inglaterra».
A sus 18 años, al igual que Leonor de Borbón, no se imagina asumir la dirección del Estado, como le podría pasar a la princesa en cualquier momento a partir de ahora, si Felipe VI deja de ser Rey, por algún motivo.
«Pero ella ha estado preparada para esto desde que nació. Creo que está lista», dijo.
En pantalla, Leonor de Borbón, tras prestar juramento y recibir una condecoración del Gobierno y de su propio padre, dirigió sus primeras palabras a los españoles y respondió a Guillermo: «Confía en mí».