El PP espera una intervención de Bruselas ante la “amnistía antidemocrática”
La propuesta de ley de amnistía fue entregada al parlamento el lunes por el Partido Socialista (PSOE) y es el resultado de acuerdos con dos partidos catalanes que a cambio permitirán un nuevo gobierno de izquierda en España esta semana, encabezado por Pedro Sánchez, tras la legislativa. elecciones del 23 de julio.
Para Feijóo, estos acuerdos son «una farsa impropia de la democracia» y ha destacado que «los políticos independentistas se amnistiarán ellos mismos».
«Que un político (Sánchez) amnistíe a políticos corruptos o acusados de terrorismo a cambio de votos no es admisible en Europa», afirmó, en un encuentro con medios no españoles en Madrid, entre ellos la agencia Lusa.
Para el PP, mayor partido en el Parlamento español, «el deterioro de la democracia española es el deterioro de la democracia europea» y la UE dispone de mecanismos para controlar el cumplimiento de los tratados europeos y el respeto del Estado de derecho por parte de los Estados miembros, recordando los procedimientos de Bruselas. en relación con países como Polonia, Hungría o Rumanía.
En el caso de España, «las hipótesis no son diferentes», afirmó Feijóo, quien apuntó que la ley de amnistía no tiene una versión definitiva, aún podría modificarse antes de ser aprobada, por lo que el PP esperará a ver si el documento que sale del Congreso de los Diputados pone en cuestión de facto «el Estado de derecho», antes de activar otros mecanismos a nivel internacional.
Por ahora, el Partido Popular Europeo ha convocado un debate sobre la situación del Estado de derecho en España en el Parlamento Europeo, que el PP español espera que tenga lugar la próxima semana.
La semana pasada, el comisario europeo de Justicia, Didier Reynders, pidió a España «información detallada» sobre la amnistía, incluso antes de que se conociera cualquier propuesta de ley, con el argumento de que estaba generando «serias preocupaciones».
El Gobierno español aseguró que explicará a la Comisión «todos los detalles» de la futura ley y envió hoy a Bruselas la propuesta entregada al Parlamento, pidiendo además una reunión para explicar el documento a los responsables europeos.
Una vez aprobada por el Congreso, la ley de amnistía tendrá que ser aprobada por el Senado español, que no puede vetarla, pero sí retrasar su entrada en vigor dos meses.
El líder del PP, Esteban González Pons, dijo hoy a la prensa extranjera en Madrid que el partido espera «una reacción» de Bruselas antes de la aprobación definitiva de la ley de amnistía «que impida esta subversión del orden constitucional» en España, dentro de «los mecanismos establecidos en el Tratados y reglamentos europeos».
Para el PP, la amnistía es inconstitucional y el preámbulo del documento conocido este lunes la justifica con «grandes mentiras», ya que el Tribunal Constitucional nunca declaró legal la amnistía a los políticos y la que tuvo lugar en 1977 fue anterior a la actual Constitución. que es del año 1978.
Por otra parte, la amnistía de 1977, aprobada en el marco de la transición de la dictadura a la democracia, tenía como objetivo «pasar de un sistema penal injusto a uno justo» y «borrar el sistema franquista», afirmó González Pons, en un referencia a la dictadura de Francisco Franco.
En el texto de «explicación de motivos» que acompaña a la propuesta de ley, el PSOE destaca que la amnistía ya fue considerada legal por el Tribunal Constitucional español en 1986 y que ya se aplicó en España en 1976 y 1977, como parte de la transición de la dictadura. a la democracia.
«Todo ello nos permite concluir que la amnistía, lejos de ser una figura inconstitucional, forma parte del pacto fundacional de la democracia española», reza el texto, que añade que, además, está reconocida y aplicada en otros países de la UE y es también «perfectamente aprobado» en organismos europeos y por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
Además de la derecha española, los acuerdos de amnistía del PSOE con los independentistas han sido impugnados por varias entidades y sectores, incluidos jueces y fiscales, que alertaron de la posibilidad de un ataque al principio de separación de poderes y a la independencia de la Justicia.
Según la propuesta de ley, se concederá amnistía a personas que ya estén procesadas, acusadas por los tribunales o involucradas en investigaciones judiciales dentro del movimiento independentista en Cataluña entre el 1 de enero de 2012 y el 13 de noviembre de 2023.
El PSOE sostiene que esta amnistía devuelve un conflicto político al ámbito político.